Facturar el equipaje de mano es una decisión influenciada por múltiples factores y dependerá de las necesidades del viaje

Viajar con equipaje de mano además de una mochila, es una práctica bastante común, más entre quienes buscan evitar las tarifas adicionales y los largos tiempos de espera asociados con la facturación de maletas. Sin embargo, con las políticas de las aerolíneas cambiando constantemente, es importante conocer las implicaciones de facturarlo o no.

Estas son las consideraciones clave y situaciones en las que puede ser necesario facturar el equipaje de mano, así como las ventajas y desventajas de cada opción.

Factores que influyen en la decisión de facturar el equipaje de mano

La decisión de facturar el equipaje de mano no siempre es sencilla. Dependerá de factores como las políticas de la aerolínea, el tamaño del equipaje, la disponibilidad de espacio en cabina y la naturaleza del viaje.

En muchos casos, la opción de no facturar puede ofrecer mayor flexibilidad y comodidad. No obstante, existen circunstancias en las que facturar el equipaje de mano es inevitable o incluso preferible.

• Políticas de la aerolínea: cada aerolínea tiene políticas específicas sobre el tamaño y el peso permitido para el equipaje de mano. Algunas aerolíneas permiten una pieza adicional, como un bolso o una mochila, mientras que otras son más estrictas. Si el equipaje excede los límites establecidos, la aerolínea puede requerir que sea facturado, incluso si originalmente estaba planeado para ser llevado a bordo.
• Disponibilidad de espacio en cabina: en vuelos llenos, especialmente en aeronaves de menor tamaño, puede haber limitaciones de espacio en los compartimentos superiores. Cuando estos se llenan, las aerolíneas pueden solicitar a los pasajeros que facturen su equipaje de mano.
• Conexiones y tiempos de escala: en vuelos con conexiones ajustadas, facturar el equipaje de mano puede reducir la preocupación de ubicar el equipaje. Sin embargo, esto introduce la posibilidad de que la maleta no llegue a tiempo al siguiente vuelo.
• Contenido del equipaje de mano: algunos artículos no están permitidos en la cabina, como líquidos en cantidades superiores a 100 ml, ciertos dispositivos electrónicos grandes o artículos considerados peligrosos. Si el equipaje contiene estos elementos, será necesario facturarlo.
• Clase de billete y beneficios adicionales: los pasajeros de clases superiores o miembros de programas de fidelización pueden disfrutar de beneficios que incluyen prioridad en el abordaje y mayor capacidad para el equipaje de mano. Sin embargo, en vuelos económicos, es común que las aerolíneas incentiven la facturación de equipaje como una medida de control de costos y espacio.

Ventajas, desventajas y consideraciones de facturarlo

Facturar el equipaje de mano tiene pros y contras que deben considerarse antes de tomar una decisión:

• Ventajas de facturar el equipaje de mano
  • Menor estrés durante el abordaje: no tener que cargar con el equipaje durante el embarque permite mayor comodidad y libertad de movimiento.
  • Reducción de tiempo en controles de seguridad: evita la inspección manual del equipaje en el aeropuerto, especialmente cuando se lleva tecnología u objetos sujetos a revisiones adicionales.
  • Mayor espacio personal: no tener equipaje de mano a bordo libera espacio en los compartimentos superiores y bajo el asiento, ofreciendo un entorno más despejado durante el vuelo.
• Desventajas de facturar el equipaje de mano
  • Posible costo adicional: en muchas aerolíneas de bajo costo, facturar cualquier tipo de equipaje genera un cargo adicional.
  • Riesgo de pérdida o retraso: facturar el equipaje introduce el riesgo de que la maleta no llegue al destino en el mismo vuelo, lo cual puede ser problemático en viajes cortos o con agendas apretadas.
  • Tiempo adicional en el aeropuerto: recoger equipaje facturado en el área de recogida añade tiempo a la salida del aeropuerto, lo cual puede ser inconveniente en destinos concurridos.

Hay circunstancias específicas en las que facturar el equipaje de mano es recomendable:

• Vuelos internacionales con escalas largas: facturar el equipaje permite mayor libertad de movimiento entre terminales y reduce el riesgo de complicaciones en aduanas.
• Viajes con artículos restringidos: cuando el equipaje contiene líquidos, objetos punzantes como cuchillas, productos de higiene o dispositivos que no pueden pasar por seguridad, la facturación es la única opción viable.
• Vuelos largos o nocturnos: facturar el equipaje de mano en vuelos de larga duración puede mejorar la experiencia de viaje al no tener que preocuparse por la ubicación y el manejo del equipaje.

Texto tomado de: https://travelandleisure-es.com